Crónicas de Espanha

VII KLASIKA MASTER LAUDIO 2015
día de perros y, como se suele decir, de pasar mucha miseria como el que han tenido los corredores hoy en Llodio, son los más duros los que se suelen llevar el gato al agua. En los 80 se solía decir que para ganar un Tour de Francia había que ser castellano, una tierra dura donde se pasa del frío al calor extremos que forja el carácter de sus gentes. Y, aunque en todas las comunidades hay grandes corredores, creo que la frase sigue teniendo plena vigencia. Hoy Alberto Sánchez y Miguel Ángel Andrés, vallisoletano y palentino respectivamente y compañeros en el Más Madera – Floor Step, lo han demostrado ocupando las dos primeras plazas del podium en Llodio, seguidos por el vasco David Busto (Zona Bike).
La prueba alavesa daba el pistoletazo de salida a la temporada máster en la zona norte de la península. En Llodio se veían las caras por primera vez escuadras reforzadas durante el pasado otoño, además del citado conjunto vallisoletano, también acudió a la cita el Goerna – Intrespa, el Zona Bike, Galdakao, Unidos por un Reto y un largo etcétera de equipos y corredores.
El viento, el frío y la lluvia han acompañado a los corredores de principio a fin durante los 75 km de los que constaba la prueba. El recorrido había sido modificado respecto al de ediciones pasadas a consecuencia de unas obras en la calzada. Como consecuencia de esto, el circuito corto veía reducida su longitud y ampliado el número de vueltas. El nuevo trazado incluía un repecho de 1 km, que con un sencillo cálculo totalizaba 6 km de ascensión totales, eso antes de afrontar las subidas a Respaldiza y Gárate (La Palanca).
Tal como contaban desde el coche del Goerna a través de Facebook, durante las cuatro primeras vueltas el pelotón se mantuvo compacto. No faltaban los intentos de fuga, pero el ritmo del pelotón los neutralizaba rápidamente. En la quinta vuelta se forma un grupo con una veintena de corredores que aventaja al pelotón en 30 segundos. La renta no parecía preocupante, pero delante rodaban los más fuertes. La escapada va aumentando su ventaja y llega a ser de 1’20”, mientras algunos corredores pierden contacto con la cabeza a consecuencia de la fatiga acumulada.
En la subida a Respaldiza Alberto ataca y se marcha en solitario, con 15 km por delante. Detrás su compañero Miguelín le guarda las espaldas, aprovechándose del trabajo de sus compañeros de fuga. Por el Alto de la Palanca Alberto pasa en solitario con un minuto de ventaja sobre su compañero Miguelín y 10 segundos más sobre David Busto. Detrás pasaba un reguero de corredores con Edorta Gorostiza, Jon Kepa (Zona Bike), Íñigo Burgos…
Por delante ya no variaría el orden de los corredores, llegando como hemos dicho Alberto, Miguelín y Busto por ese orden.